Soy madre de gemelos o morochos como les decimos en mi país, Venezuela. Esposa desde hace 17 años.
Me fascina la comunicación y mucho más en digital, por esta razón estudié Comunicación Social, mención Audiovisual, porque definitivamente todo lo que comunica con audio e imágenes son mi pasión.
Tengo espíritu de emprendedora desde hace mucho tiempo y fue a mis 37 años, en el 2018, cuando empecé mi primera aventura como emprendedora con una pequeña tienda virtual donde vendía golosinas y productos venezolanos en Estados Unidos. Bajo el nombre “Todo bien chévere” logré conectar con mi misión y hacer brillar mi esencia, enlazar a los venezolanos en Estados Unidos con ese corazón que se aloja en sus barrigas.
Todo iba muy bien y… ¡llegó el 2020! Con todo lo sucedido con la pandemia tuve que tomar la decisión de detener el negocio porque las personas ya no compraban chucherías, sus intereses y necesidades eran otros.
Honestamente, me sentí frustrada, triste y con algo de rabia porque pensé que habían sido años perdidos en cuanto a inversión, tiempo y aprendizaje. Hoy puedo decir que no fue así. “Todo bien chévere” fue una gran experiencia para conectar con el emprendimiento y el mercadeo digital.
Así que decidí continuar preparándome profesionalmente. Comencé estudiando en la DePaul University de Chicago una certificación en Mercadeo Digital, algo que conjuga con mi carrera como Comunicadora Social y experiencia de más de 13 años en el mundo corporativo y la comunicación digital.